[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
La
palabra magia, evoca una de las habilidades más incomprendidas y menos
estudiadas, que remonta su origen a los inicios de nuestra Humanidad. La
historia registra los nombres de aquellos personajes, que demostraron
conocimientos sobre algunos campos ocultos, y prohibidos, asombrando a
sus contemporáneos, y que se tenían como un saber olvidado, cultivado en
soledad, así como el seno de ciertas órdenes secretas.
Uno de
los nombres que trascendió en esta disciplina fue John Dee, figura
legendaria dentro del ocultismo, además de ser uno de los últimos
representantes de la magia ceremonial que más tarde influenciaría a la
Golden Dawn, que en los comienzos del siglo XX retomaría las enseñanzas
legadas por Dee. La carrera de este mago, se desarrolló durante el
reinado de Isabel I de en la Inglaterra en las postrimerías del siglo
XV.
Dee fue una mente brillante, y uno de los hombres más
atrayentes de su época. Inventor, geógrafo, alquimista, además de un
extraordinario estudioso, lo convierten en una figura clave y digna de
profundizar, sin embargo desde Crónica deseamos extendernos en uno de
los capítulos más enigmáticos de su vida, cuya información consideramos
vital, donde mundo subterráneo, viaje en el tiempo, entidades
dimensionales, además de idioma angélico, es una puerta abierta a los
misterios que aún siguen dominando el recién iniciado siglo XXI. ¿Fue
Dee un precursor en estos campos?
Decida el lector.
LO QUE VIO JOHN DEE EN EL ESPEJO NEGRO -Los Libros Condenados - Jacques Bergier. Cap. V.
Como
el abad Tritemo, John Dee existió en realidad. Nació en 1527 y murió en
1608. Y su vida fue tan extraordinaria que los novelistas la han
descrito mejor, en obras de imaginación, que la mayoría de sus
biógrafos. Estos novelistas son Jean Ray y Gustav Meyrmk. Matemático
distinguido, especialista en clasicismo, John Dee concibió la idea de un
meridiano básico: el meridiano de Greenwich. Llevó a Inglaterra,
después de descubrirlos en Lovaina, dos de los globos terráqueos de
Mercator, así como instrumentos de navegación. De este modo contribuyó a
la iniciación de la expansión marítima de Inglaterra.
Por esto
alguien ha dicho -yo no comparto esta opinión- que John Dee fue el
primero que hizo espionaje industrial, pues llevó a Inglaterra, por
cuenta de la reina Isabel, unos poderosos secretos de navegación y de
fabricación. Fue, ciertamente, un científico de primer orden, al mismo
tiempo que especialista en literatura clásica, y exponente de la
transición entre dos culturas que en el siglo XVI, no estaban tal vez
tan separadas como en la actualidad.
Pero fue también algo más,
según veremos a continuación. En el curso de sus brillantes estudios en
Cambridge, empezó, desgraciadamente para él, a fabricar robots, entre
ellos un escarabajo mecánico que soltó durante una representación
teatral y que sembró el pánico entre el público. Expulsado de Cambridge
por brujería, se marchó a Lovaina en 1547. Allí entabló relación con
Mercator. Se hizo astrólogo y se ganó la vida haciendo horóscopos;
después, fue detenido por conspiración mágica contra la vida de la reina
María Tudor. Más tarde, Isabel le sacó de la cárcel y le encargó
misiones misteriosas en el continente.
Se ha dicho con frecuencia
que su visible pasión por la magia y la brujería no era más que una
«pantalla» de su verdadera profesión: el espionaje. Yo no estoy muy
convencido de ello.
En 1563, encontró en una librería de Amberes
un manuscrito, probablemente incompleto, de la Esteganografía de
Tritemo. La completó y parece que descubrió un método casi tan eficaz
como el del propio Tritemo.
Mientras publicaba la primera
traducción inglesa de Euclides y estudiaba, en interés del Ejército
inglés, la utilización militar de lentes y telescopios, continuó sus
estudios sobre la Esteganografía. Y, el 25 de mayo de 1581, éstos
superaron todas sus esperanzas.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Se
le apareció un ser sobrehumano, o al menos no humano, rodeado de luz.
John Dee lo llamó ángel, para simplificar. Este ángel le entregó un
espejo negro, que aún se conserva en el «British Museum». Es un pedazo
de antracita, extraordinariamente pulimentado. El ángel le dijo que,
mirando este cristal, vería otros mundos y podría establecer contacto
con inteligencias distintas de la del hombre, idea que resulta
singularmente moderna. El anotó las conversaciones que sostuvo con estos
seres no humanos, y cierto número de ellas fueron publicadas en 1659
por Meric Casaubon, con el título de A true and faithfull relation of
what passed betwen Dr. John Dee and some spirits (Verídico y fiel relato
de lo que pasó entre el doctor John Dee y unos espíritus).
Otras conversaciones permanecieron inéditas, y sus manuscritos se encuentran en el «British Museum».
La
mayor parte de las notas tomadas por John Dee y los libros que estaba
preparando fueron, como vamos a ver, destruidos. Sin embargo, nos quedan
elementos suficientes para que podamos reconstituir la lengua que
hablaban aquellos seres y que Dee llamaba lengua enoquiana.
Esta,
o bien la primera lengua sintética, o bien la primera lengua no humana
de que tenemos conocimiento. Es, en todo caso, una lengua completa, con
su alfabeto y su gramática. Entre todos los textos en lengua enoquiana
que se conservan, hay algunos que se refieren a matemáticas más
avanzadas que las de la época en que vivió John Dee.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
La lengua enoquiana constituyó la base de la doctrina secreta de la famosa sociedad de la Golden Dawn, a. finales del siglo XIX.
Dee
advirtió muy pronto que no conseguía recordar las conversaciones que
sostenía con sus extraños visitantes. En aquellos tiempos, no existía
ningún aparato para el registro mecánico de la palabra. Si hubiese
podido disponer de un fonógrafo o de un magnetófono, el destino de Dee, o
tal vez el del mundo, habría sido muy distinto.
Desgraciadamente,
Dee tuvo una idea que le llevó a su perdición. Sin embargo, era
perfectamente racional: encontrar alguien que contemplase el espejo
mágico y hablase con los extraterrestres mientras Dee tomaba notas. En
principio, la idea era sencilla. Desgraciadamente, los dos visionarios
reclutados por Dee, Barnabas Saul y Edward Talbott, resultaron ser unos
canallas de la peor calaña. Se libró con bastante rapidez de Saul, que
parece haber sido un espía a sueldo de sus enemigos. En cambio, Talbott,
que cambió su nombre por el de Kelly, permaneció aferrado a él. Tan
aferrado que arruinó a Dee, sedujo a su esposa, los paseó por Europa,
con el pretexto de hacer de él un alquimista, y acabó por destrozar
completamente su vida. Dee murió en 1608, arruinado y absolutamente
desacreditado. El rey Jacobo 1, que había sucedido a Isabel, le negó una
pensión, y Dee murió en la miseria. Nuestro único consuelo es pensar
que Talbott, alias Kelly, murió en febrero de 1595, cuando trataba de
evadirse de una cárcel de Praga. Como era muy alto y estaba demasiado
gordo, la cuerda que había confeccionado se rompió, el hombre cayó y se
fracturó las piernas y los brazos. Justo final de uno de los perdularios
más siniestros que recuerda la Historia.
A pesar de la
protección de Isabel, continuó la persecución contra Dee, cuyos
manuscritos' fueron robados, así como buena parte de sus notas.
Reconozcamos
que, si se vio reducido a la miseria, lo había merecido en parte. En
efecto: después de decirle a la reina Isabel que era alquimista, le
pidió ayuda financiera. Isabel de Inglaterra le respondió, con buena
lógica, que, si sabía fabricar oro, éste debía bastarle para cubrir sus
necesidades. Por último, John Dee se vio obligado, para vivir, a vender
su inmensa biblioteca, y su muerte se debió en parte al hambre.
La
Historia ha conservado sobre todo los inverosímiles episodios de sus
aventuras con Kelly, que son realmente pintorescas. Allí aparece por
primera vez, y en particular, el intercambio de mujeres que se ha hecho
actualmente tan popular en los Estados Unidos.
Pero estas escenas
de Epinal oscurecen el verdadero problema, que es el de la lengua
enoquiana, el de los libros del doctor John Dee que no pudieron
publicarse jamás.
Jacques Sadoul, en su obra El tesoro de los
alquimistas, refiere muy bien el aspecto propia mente alquímico de las
aventuras del doctor Dee y de Kelly. Remito a ella al lector interesado.
Volvamos
al lenguaje enoquiano y a sus consecuencias. Y hablemos ante todo de la
persecución de que fue víctima John Dee, desde que empezó a anunciar
que publicaría sus conversaciones con unos «ángeles» no humanos. En
1597, aprovechando su ausencia, unos desconocidos excitaron a la chusma,
que asaltó su casa. Cuatro mil obras raras y cinco manuscritos
desaparecieron definitivamente, y numerosas notas fueron quemadas.
Después, a pesar de la protección de la reina de Inglaterra, prosiguió
la persecución. Por último, el hombre destrozado desacreditado, como lo
será más tarde Madame Blavatsky, murió, a los 81 años, en 1608 en
Mortlake. Una vez mas, la conspiración de los «Hombres de Negro» pareció
haber triunfado.
La excelente enciclopedia inglesa, Man, Myth
and Magic, observa acertadamente en su artí*** sobre John Dee que:
«Aunque los documentos sobre la vida de Dee son abundantes, no se ha
hecho gran cosa para explicarlo y para Interpretarlo> Esto es
perfectamente cierto.
En cambio no faltan las calumnias contra
Dee. En las épocas supersticiosas se afirmó que practicaba la magia
negra. En nuestra, época racionalista se afirma que era un espía, que
practicaba la alquimia y la magia negra para disimular sus verdaderas
actividades. Esta tesis es la sostenida por la enciclopedia inglesa que
acabamos de citar.
Sin embargo, si examinamos los hechos, vemos
ante todo un hombre muy dotado, capaz de trabajar veintidós de las
veinticuatro horas del día, lector rapidísimo y matemático práctico de
primer orden. Además, construye autómatas y es especialista en óptica, y
sus aplicaciones militares, así como en Química.
Es posible
que fuese también ingenuo y crédulo. La historia de Kelly lo demuestra.
Pero no hay que excluir la posibilidad de que hiciese un descubrimiento
muy importante tal vez el más importante de toda la historia de la
Humanidad. Me parece muy posible que Dee estableciese contacto por
telepatía, clarividencia o cualquier otro medio parapsicológico, con
seres no humanos. Era natural, dada la mentalidad de la época, que
atribuyese a aquellos seres un origen angélico, más que hacerlos venir
de otro planeta o de otra dimensión. Pero comunicó lo bastante con ellos
para aprender una lengua no humana.
La idea de inventar una
lengua completamente nueva no corresponde a la época de Dee, y tampoco
concuerda con su mentalidad. Sólo mucho más tarde, inventará Wilkins la
primera lengua sintética. El lenguaje enoquiano es absolutamente
completo y no se parece a ninguna lengua humana.
Desde luego, es
posible que Dee la sacase íntegramente de su subconsciente o del
inconsciente colectivo, pero esta hipótesis es casi tan fantástica como
la de la comunicación con seres extraterrestres., Por desgracia, a
partir de la intervención de Kelly, las conversaciones son visiblemente
amañadas. Kelly las inventa de cabo a rabo y hace decir a los ángeles o a
los espíritus lo que le conviene. Y, desde el punto de vista de la
inteligencia y de la imaginación Kelly estaba poco dotado. Poseemos
notas sobre una conversación en la que pide a un «espíritu» que le
preste cien libras esterlinas, a devolver en quince días.
En
cambio, antes de conocer a Kelly, Dee había publicado un libro extraño:
La Mónada jeroglífica. Había trabajado siete años en este libro, pero,
cuando leyó la Esteganografía lo terminó en doce días. Un hombre de
Estado de su tiempo, Sir William Cecíl, declaró que «los secretos que se
encuentran en La Mónada jeroglífica son de la mayor Importancia para la
seguridad del reino».
Naturalmente, se ha querido relacionar
estos secretos con la criptografía, cosa que es bastante probable. Pero
me parece excesivo que se quiera hacer depender del espionaje todo lo
referente a John Dee, pues los alquimistas y los magos utilizaban mucho
la criptografía, en formas más complejas que las empleadas por los
espías. Yo me sentiría más inclinado a tomar a Dee al pie de la letra y
pensar que, por una especie de autohipnotismo producido por un espejo, o
por otras manipulaciones, consiguió franquear una barrera entre los
planetas o entre las dimensiones.
Desgraciadamente, Y según
confiesa él mismo, estaba desprovisto por completo de dotes
paranormales. Dio un mal paso al contratar a unos «médíums», y la cosa
terminó en desastre.
Por lo demás, un desastre provocado,
explotado multiplicado por los «Superiores», que no querían que
publicase lisa y llanamente lo que había dicho en clave en La Monada
jeroglífica. La persecución de Dee empezó en 1587 y no terminó hasta su
muerte. Esta persecución tuvo también lugar en el continente, donde el
rey de Polonia y el emperador Rodolfo II recibieron mensajes de
advertencia «de los espíritus» contra Dee, y donde el nuncio del Papa
presentó al emperador Rodolfo, el 6 de mayo de 1586, un documento en el
que se-acusaba a Dee de nigromancia.
Fue un hombre desanimado el
que regresó a Inglaterra, negándose a publicar sus obras, y que murió
siendo rector del «Colegio de Cristo» en Manchester, cargo que ejerció
desde 1595 hasta 1605 y que, según parece, no le dió muchas
satisfacciones.
Digamos, a propósito de este cargo, que existe un
problema que no ha sido resuelto. Aproxímadamente en la misma época, el
zar de Rusia invitó a John Dee a trasladarse a Moscú, en calidad de
consejero científico. Percibiría un salario de dos mil libras esterlinas
al año, enorme cantidad equivalente a unas doscientas mil libras
actuales, dispondría de una mansión señorial y disfrutaría de una
posición que, según la carta del zar, «debía hacer de él uno de los
hombres más importantes de Rusia». Sin embargo, John Dee rehusó. ¿Se
opuso, quizás, Isabel de Inglaterra? ¿O bien fue objeto de amenazas?
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
No
lo sabemos, pues los documentos son demasiado vagos. En todo caso, las
numerosas calumnias según las cuales Dee, completamente dominado por
Kelly, había recorrido el continente esquilmando, uno tras otro, a los
príncipes y a los ricos, no pueden sostenerse si se tiene en cuenta esta
negativa. Tal vez temió que el zar le obligase a poner en práctica los
secretos que había descubierto, para asegurar a Rusia la dominación del
mundo.
Sea de ello lo que fuere, Dee se nos presenta como un
hombre que recibió la visita de seres no humanos, que aprendió su lengua
y que trató de establecer con ellos una comunicación regular. El caso
es absolutamente único, sobre todo tratándose de un hombre del valor
intelectual de John Dee,
Desgraciadamente, nada podemos deducir
partiendo de lo que nos legó Dee, sobre el lugar donde moraban estos
seres, ni sobre su naturaleza física. Dice, simplemente, que son
telépatas y que pueden viajar en el pasado y en el futuro. Es la primera
vez, que yo sepa, que se formula la Idea del Viaje en el tiempo.
Dee
esperaba aprender de estos seres todo el conjunto de las leyes
naturales, todo el desarrollo futuro de las matemáticas. No se trataba,
pues, de nigromancia, ni siquiera de espiritualidad. Dee adoptaba la
posición del sabio que quería descubrir secretos, secretos cuya
naturaleza era esencialmente científica. Él mismo se calificaba, en todo
momento, de filósofo matemático.
La mayor parte de las notas
desaparecieron en el incendio de su casa; otras fueron destruidas. en
varias ocasiones, por personas muy distintas. Nos quedan algunas
alusiones contenidas en La verdadera relación de Casaubon y en ciertas
notas que aún se conservan. Estas indicaciones son sumamente curiosas.
Dee afirma, en particular, que la proyección de mercator no es más que
una primera aproximación. Según él, la Tierra no es exactamente redonda,
o, al menos, está compuesta de varias esferas superpuestas, alineadas a
lo largo de otra dimensión.
Entre estas esferas, habría puntos o
más bien superficies de comunicación, y, de este modo, GroenIandia se
extendería en el infinito sobre otras tierras diferentes de la nuestra.
Por esto, insistía Dee en varias instancias dirigidas a la reina Isabel,
convenía que Inglaterra se apoderase de Groenlandia, para tener en sus
manos la puerta de otros mundos.
Otra indicación: las matemáticas
estaban solamente en su principio, y se podía ir mucho más lejos que
Euclides, el cual, hay que recordarlo, fue traducido por primera vez al
inglés por Dee. Éste tenía toda la razón al afirmar esto, y las
geometrías no euclidianas que debían aparecer más tarde confirman su
punto de vista.
Es posible, dice también John Dee, construir
máquinas totalmente automáticas que realicen todo el trabajo del hombre.
Esto, añade, ha sido ya realizado en otra parte, en 1585 ... Ojalá
supiésemos dónde.
Insiste también en la importancia de los
números y en la considerable dificultad de la aritmética superior. Una
vez más, tiene razón. La teoría de los números ha resultado ser la rama
más difícil de las matemáticas, mucho más que el álgebra o la geometría.
Es
muy importante, observa John Dee, estudiar los sueños, que revelan, a
la vez, nuestro mundo interior y mundos exteriores. Este punto de vista,
perfectamente jungiano, le sitúa muy por delante de su época. Es
esencial, advierte también, ocultar a las masas secretos que pueden ser
sumamente peligrosos. Aquí encontramos otra idea moderna. Como la
encontramos en el tema permanente del Diario de Dee, a saber, que se
pueden conseguir facultades perfectamente naturales e ilimitadas con el
conocimiento de la Naturaleza, pero que se necesita gastar mucho dinero
en la investigación.
Para tener este dinero buscó la protección
de los grandes e intentó fabricar oro. No consiguió ninguna de ambas
cosas. Si hubiese podido encontrar un mecenas, habría cambiado el mundo.
Entre
las personas a quienes conoció ¿se encontraba William Shakespeare
(1564-1616)? Me inclino a creer que sí. Cierto número de críticos
shakespearianos están de acuerdo en admitir que John Dee es el original
del personaje Próspero, de La Tempestad. En cambio, todavía no ha
habido, que yo sepa, antishakespearianos lo bastante locos pata imaginar
que la obra de Shakespeare fue escrita por John Dee. Sin embargo, Dee
me parece un candidato mejor que Francis Bacon a este respecto.
A
propósito, no puedo resistir la tentación de citar una teoría del
humorista inglés A. A. Milne. Según él, Shakespeare no escribió
solamente su propia obra, sino también Novum Organum, por cuenta de
Francis Bacon, ¡que era completamente analfabeto! Esta teoría enfureció a
los baconianos, es decir, a los que sostienen que Francis Bacon
escribió la obra de Shakespeare.
Liquidemos de pasada otra
leyenda: John Dee no tradujo jamás el libro condenado, el Necronomicón
de Abdul Al Azred, por la sencilla razón de que esta obra no ha existido
nun¬ca. Pero, como dice acertadamente Lin Carter, si el Necronomicón
hubiese existido, Dee habría sido, evidentemente, el único hombre capaz
de procurárselo y de traducirlo.
Desgraciadamente, el
Necronomicón fue inventado de cabo a rabo por Lovecraft, el cual me lo
confirmó en una carta. Es una lástima.
La piedra negra,
procedente de otro universo, recogida en primer lugar por el conde de
Peterborough y, después, por Horace Walpole, se halla actualmente en el
«British Museum». Este no permite que se utilice ni que sea sometida a
ciertos análisis. Es una decisión lamentable. Pero si los análisis del
carbono que compone esta piedra diesen una forma isotópica distinta de
la del carbono terrestre, demostrando que la piedra viene de otra parte,
todo el mundo se sentiría aturrullado.
La Mónada jeroglífica de
Dee puede encontrarse o conseguirse en forma de fotocopias. Pero sin las
claves correspondientes a los diversos códigos de la obra, y sin los
otros manuscritos de John Dee, quemados en Mortlake o destruidos por
orden del rey Jacobo I, no puede servirnos de gran cosa.
Fuente
Bergier, Jacques. Los libros Condenados. Barcelona: Plaza & Janes, 1971
La
palabra magia, evoca una de las habilidades más incomprendidas y menos
estudiadas, que remonta su origen a los inicios de nuestra Humanidad. La
historia registra los nombres de aquellos personajes, que demostraron
conocimientos sobre algunos campos ocultos, y prohibidos, asombrando a
sus contemporáneos, y que se tenían como un saber olvidado, cultivado en
soledad, así como el seno de ciertas órdenes secretas.
Uno de
los nombres que trascendió en esta disciplina fue John Dee, figura
legendaria dentro del ocultismo, además de ser uno de los últimos
representantes de la magia ceremonial que más tarde influenciaría a la
Golden Dawn, que en los comienzos del siglo XX retomaría las enseñanzas
legadas por Dee. La carrera de este mago, se desarrolló durante el
reinado de Isabel I de en la Inglaterra en las postrimerías del siglo
XV.
Dee fue una mente brillante, y uno de los hombres más
atrayentes de su época. Inventor, geógrafo, alquimista, además de un
extraordinario estudioso, lo convierten en una figura clave y digna de
profundizar, sin embargo desde Crónica deseamos extendernos en uno de
los capítulos más enigmáticos de su vida, cuya información consideramos
vital, donde mundo subterráneo, viaje en el tiempo, entidades
dimensionales, además de idioma angélico, es una puerta abierta a los
misterios que aún siguen dominando el recién iniciado siglo XXI. ¿Fue
Dee un precursor en estos campos?
Decida el lector.
LO QUE VIO JOHN DEE EN EL ESPEJO NEGRO -Los Libros Condenados - Jacques Bergier. Cap. V.
Como
el abad Tritemo, John Dee existió en realidad. Nació en 1527 y murió en
1608. Y su vida fue tan extraordinaria que los novelistas la han
descrito mejor, en obras de imaginación, que la mayoría de sus
biógrafos. Estos novelistas son Jean Ray y Gustav Meyrmk. Matemático
distinguido, especialista en clasicismo, John Dee concibió la idea de un
meridiano básico: el meridiano de Greenwich. Llevó a Inglaterra,
después de descubrirlos en Lovaina, dos de los globos terráqueos de
Mercator, así como instrumentos de navegación. De este modo contribuyó a
la iniciación de la expansión marítima de Inglaterra.
Por esto
alguien ha dicho -yo no comparto esta opinión- que John Dee fue el
primero que hizo espionaje industrial, pues llevó a Inglaterra, por
cuenta de la reina Isabel, unos poderosos secretos de navegación y de
fabricación. Fue, ciertamente, un científico de primer orden, al mismo
tiempo que especialista en literatura clásica, y exponente de la
transición entre dos culturas que en el siglo XVI, no estaban tal vez
tan separadas como en la actualidad.
Pero fue también algo más,
según veremos a continuación. En el curso de sus brillantes estudios en
Cambridge, empezó, desgraciadamente para él, a fabricar robots, entre
ellos un escarabajo mecánico que soltó durante una representación
teatral y que sembró el pánico entre el público. Expulsado de Cambridge
por brujería, se marchó a Lovaina en 1547. Allí entabló relación con
Mercator. Se hizo astrólogo y se ganó la vida haciendo horóscopos;
después, fue detenido por conspiración mágica contra la vida de la reina
María Tudor. Más tarde, Isabel le sacó de la cárcel y le encargó
misiones misteriosas en el continente.
Se ha dicho con frecuencia
que su visible pasión por la magia y la brujería no era más que una
«pantalla» de su verdadera profesión: el espionaje. Yo no estoy muy
convencido de ello.
En 1563, encontró en una librería de Amberes
un manuscrito, probablemente incompleto, de la Esteganografía de
Tritemo. La completó y parece que descubrió un método casi tan eficaz
como el del propio Tritemo.
Mientras publicaba la primera
traducción inglesa de Euclides y estudiaba, en interés del Ejército
inglés, la utilización militar de lentes y telescopios, continuó sus
estudios sobre la Esteganografía. Y, el 25 de mayo de 1581, éstos
superaron todas sus esperanzas.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Se
le apareció un ser sobrehumano, o al menos no humano, rodeado de luz.
John Dee lo llamó ángel, para simplificar. Este ángel le entregó un
espejo negro, que aún se conserva en el «British Museum». Es un pedazo
de antracita, extraordinariamente pulimentado. El ángel le dijo que,
mirando este cristal, vería otros mundos y podría establecer contacto
con inteligencias distintas de la del hombre, idea que resulta
singularmente moderna. El anotó las conversaciones que sostuvo con estos
seres no humanos, y cierto número de ellas fueron publicadas en 1659
por Meric Casaubon, con el título de A true and faithfull relation of
what passed betwen Dr. John Dee and some spirits (Verídico y fiel relato
de lo que pasó entre el doctor John Dee y unos espíritus).
Otras conversaciones permanecieron inéditas, y sus manuscritos se encuentran en el «British Museum».
La
mayor parte de las notas tomadas por John Dee y los libros que estaba
preparando fueron, como vamos a ver, destruidos. Sin embargo, nos quedan
elementos suficientes para que podamos reconstituir la lengua que
hablaban aquellos seres y que Dee llamaba lengua enoquiana.
Esta,
o bien la primera lengua sintética, o bien la primera lengua no humana
de que tenemos conocimiento. Es, en todo caso, una lengua completa, con
su alfabeto y su gramática. Entre todos los textos en lengua enoquiana
que se conservan, hay algunos que se refieren a matemáticas más
avanzadas que las de la época en que vivió John Dee.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
La lengua enoquiana constituyó la base de la doctrina secreta de la famosa sociedad de la Golden Dawn, a. finales del siglo XIX.
Dee
advirtió muy pronto que no conseguía recordar las conversaciones que
sostenía con sus extraños visitantes. En aquellos tiempos, no existía
ningún aparato para el registro mecánico de la palabra. Si hubiese
podido disponer de un fonógrafo o de un magnetófono, el destino de Dee, o
tal vez el del mundo, habría sido muy distinto.
Desgraciadamente,
Dee tuvo una idea que le llevó a su perdición. Sin embargo, era
perfectamente racional: encontrar alguien que contemplase el espejo
mágico y hablase con los extraterrestres mientras Dee tomaba notas. En
principio, la idea era sencilla. Desgraciadamente, los dos visionarios
reclutados por Dee, Barnabas Saul y Edward Talbott, resultaron ser unos
canallas de la peor calaña. Se libró con bastante rapidez de Saul, que
parece haber sido un espía a sueldo de sus enemigos. En cambio, Talbott,
que cambió su nombre por el de Kelly, permaneció aferrado a él. Tan
aferrado que arruinó a Dee, sedujo a su esposa, los paseó por Europa,
con el pretexto de hacer de él un alquimista, y acabó por destrozar
completamente su vida. Dee murió en 1608, arruinado y absolutamente
desacreditado. El rey Jacobo 1, que había sucedido a Isabel, le negó una
pensión, y Dee murió en la miseria. Nuestro único consuelo es pensar
que Talbott, alias Kelly, murió en febrero de 1595, cuando trataba de
evadirse de una cárcel de Praga. Como era muy alto y estaba demasiado
gordo, la cuerda que había confeccionado se rompió, el hombre cayó y se
fracturó las piernas y los brazos. Justo final de uno de los perdularios
más siniestros que recuerda la Historia.
A pesar de la
protección de Isabel, continuó la persecución contra Dee, cuyos
manuscritos' fueron robados, así como buena parte de sus notas.
Reconozcamos
que, si se vio reducido a la miseria, lo había merecido en parte. En
efecto: después de decirle a la reina Isabel que era alquimista, le
pidió ayuda financiera. Isabel de Inglaterra le respondió, con buena
lógica, que, si sabía fabricar oro, éste debía bastarle para cubrir sus
necesidades. Por último, John Dee se vio obligado, para vivir, a vender
su inmensa biblioteca, y su muerte se debió en parte al hambre.
La
Historia ha conservado sobre todo los inverosímiles episodios de sus
aventuras con Kelly, que son realmente pintorescas. Allí aparece por
primera vez, y en particular, el intercambio de mujeres que se ha hecho
actualmente tan popular en los Estados Unidos.
Pero estas escenas
de Epinal oscurecen el verdadero problema, que es el de la lengua
enoquiana, el de los libros del doctor John Dee que no pudieron
publicarse jamás.
Jacques Sadoul, en su obra El tesoro de los
alquimistas, refiere muy bien el aspecto propia mente alquímico de las
aventuras del doctor Dee y de Kelly. Remito a ella al lector interesado.
Volvamos
al lenguaje enoquiano y a sus consecuencias. Y hablemos ante todo de la
persecución de que fue víctima John Dee, desde que empezó a anunciar
que publicaría sus conversaciones con unos «ángeles» no humanos. En
1597, aprovechando su ausencia, unos desconocidos excitaron a la chusma,
que asaltó su casa. Cuatro mil obras raras y cinco manuscritos
desaparecieron definitivamente, y numerosas notas fueron quemadas.
Después, a pesar de la protección de la reina de Inglaterra, prosiguió
la persecución. Por último, el hombre destrozado desacreditado, como lo
será más tarde Madame Blavatsky, murió, a los 81 años, en 1608 en
Mortlake. Una vez mas, la conspiración de los «Hombres de Negro» pareció
haber triunfado.
La excelente enciclopedia inglesa, Man, Myth
and Magic, observa acertadamente en su artí*** sobre John Dee que:
«Aunque los documentos sobre la vida de Dee son abundantes, no se ha
hecho gran cosa para explicarlo y para Interpretarlo> Esto es
perfectamente cierto.
En cambio no faltan las calumnias contra
Dee. En las épocas supersticiosas se afirmó que practicaba la magia
negra. En nuestra, época racionalista se afirma que era un espía, que
practicaba la alquimia y la magia negra para disimular sus verdaderas
actividades. Esta tesis es la sostenida por la enciclopedia inglesa que
acabamos de citar.
Sin embargo, si examinamos los hechos, vemos
ante todo un hombre muy dotado, capaz de trabajar veintidós de las
veinticuatro horas del día, lector rapidísimo y matemático práctico de
primer orden. Además, construye autómatas y es especialista en óptica, y
sus aplicaciones militares, así como en Química.
Es posible
que fuese también ingenuo y crédulo. La historia de Kelly lo demuestra.
Pero no hay que excluir la posibilidad de que hiciese un descubrimiento
muy importante tal vez el más importante de toda la historia de la
Humanidad. Me parece muy posible que Dee estableciese contacto por
telepatía, clarividencia o cualquier otro medio parapsicológico, con
seres no humanos. Era natural, dada la mentalidad de la época, que
atribuyese a aquellos seres un origen angélico, más que hacerlos venir
de otro planeta o de otra dimensión. Pero comunicó lo bastante con ellos
para aprender una lengua no humana.
La idea de inventar una
lengua completamente nueva no corresponde a la época de Dee, y tampoco
concuerda con su mentalidad. Sólo mucho más tarde, inventará Wilkins la
primera lengua sintética. El lenguaje enoquiano es absolutamente
completo y no se parece a ninguna lengua humana.
Desde luego, es
posible que Dee la sacase íntegramente de su subconsciente o del
inconsciente colectivo, pero esta hipótesis es casi tan fantástica como
la de la comunicación con seres extraterrestres., Por desgracia, a
partir de la intervención de Kelly, las conversaciones son visiblemente
amañadas. Kelly las inventa de cabo a rabo y hace decir a los ángeles o a
los espíritus lo que le conviene. Y, desde el punto de vista de la
inteligencia y de la imaginación Kelly estaba poco dotado. Poseemos
notas sobre una conversación en la que pide a un «espíritu» que le
preste cien libras esterlinas, a devolver en quince días.
En
cambio, antes de conocer a Kelly, Dee había publicado un libro extraño:
La Mónada jeroglífica. Había trabajado siete años en este libro, pero,
cuando leyó la Esteganografía lo terminó en doce días. Un hombre de
Estado de su tiempo, Sir William Cecíl, declaró que «los secretos que se
encuentran en La Mónada jeroglífica son de la mayor Importancia para la
seguridad del reino».
Naturalmente, se ha querido relacionar
estos secretos con la criptografía, cosa que es bastante probable. Pero
me parece excesivo que se quiera hacer depender del espionaje todo lo
referente a John Dee, pues los alquimistas y los magos utilizaban mucho
la criptografía, en formas más complejas que las empleadas por los
espías. Yo me sentiría más inclinado a tomar a Dee al pie de la letra y
pensar que, por una especie de autohipnotismo producido por un espejo, o
por otras manipulaciones, consiguió franquear una barrera entre los
planetas o entre las dimensiones.
Desgraciadamente, Y según
confiesa él mismo, estaba desprovisto por completo de dotes
paranormales. Dio un mal paso al contratar a unos «médíums», y la cosa
terminó en desastre.
Por lo demás, un desastre provocado,
explotado multiplicado por los «Superiores», que no querían que
publicase lisa y llanamente lo que había dicho en clave en La Monada
jeroglífica. La persecución de Dee empezó en 1587 y no terminó hasta su
muerte. Esta persecución tuvo también lugar en el continente, donde el
rey de Polonia y el emperador Rodolfo II recibieron mensajes de
advertencia «de los espíritus» contra Dee, y donde el nuncio del Papa
presentó al emperador Rodolfo, el 6 de mayo de 1586, un documento en el
que se-acusaba a Dee de nigromancia.
Fue un hombre desanimado el
que regresó a Inglaterra, negándose a publicar sus obras, y que murió
siendo rector del «Colegio de Cristo» en Manchester, cargo que ejerció
desde 1595 hasta 1605 y que, según parece, no le dió muchas
satisfacciones.
Digamos, a propósito de este cargo, que existe un
problema que no ha sido resuelto. Aproxímadamente en la misma época, el
zar de Rusia invitó a John Dee a trasladarse a Moscú, en calidad de
consejero científico. Percibiría un salario de dos mil libras esterlinas
al año, enorme cantidad equivalente a unas doscientas mil libras
actuales, dispondría de una mansión señorial y disfrutaría de una
posición que, según la carta del zar, «debía hacer de él uno de los
hombres más importantes de Rusia». Sin embargo, John Dee rehusó. ¿Se
opuso, quizás, Isabel de Inglaterra? ¿O bien fue objeto de amenazas?
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
No
lo sabemos, pues los documentos son demasiado vagos. En todo caso, las
numerosas calumnias según las cuales Dee, completamente dominado por
Kelly, había recorrido el continente esquilmando, uno tras otro, a los
príncipes y a los ricos, no pueden sostenerse si se tiene en cuenta esta
negativa. Tal vez temió que el zar le obligase a poner en práctica los
secretos que había descubierto, para asegurar a Rusia la dominación del
mundo.
Sea de ello lo que fuere, Dee se nos presenta como un
hombre que recibió la visita de seres no humanos, que aprendió su lengua
y que trató de establecer con ellos una comunicación regular. El caso
es absolutamente único, sobre todo tratándose de un hombre del valor
intelectual de John Dee,
Desgraciadamente, nada podemos deducir
partiendo de lo que nos legó Dee, sobre el lugar donde moraban estos
seres, ni sobre su naturaleza física. Dice, simplemente, que son
telépatas y que pueden viajar en el pasado y en el futuro. Es la primera
vez, que yo sepa, que se formula la Idea del Viaje en el tiempo.
Dee
esperaba aprender de estos seres todo el conjunto de las leyes
naturales, todo el desarrollo futuro de las matemáticas. No se trataba,
pues, de nigromancia, ni siquiera de espiritualidad. Dee adoptaba la
posición del sabio que quería descubrir secretos, secretos cuya
naturaleza era esencialmente científica. Él mismo se calificaba, en todo
momento, de filósofo matemático.
La mayor parte de las notas
desaparecieron en el incendio de su casa; otras fueron destruidas. en
varias ocasiones, por personas muy distintas. Nos quedan algunas
alusiones contenidas en La verdadera relación de Casaubon y en ciertas
notas que aún se conservan. Estas indicaciones son sumamente curiosas.
Dee afirma, en particular, que la proyección de mercator no es más que
una primera aproximación. Según él, la Tierra no es exactamente redonda,
o, al menos, está compuesta de varias esferas superpuestas, alineadas a
lo largo de otra dimensión.
Entre estas esferas, habría puntos o
más bien superficies de comunicación, y, de este modo, GroenIandia se
extendería en el infinito sobre otras tierras diferentes de la nuestra.
Por esto, insistía Dee en varias instancias dirigidas a la reina Isabel,
convenía que Inglaterra se apoderase de Groenlandia, para tener en sus
manos la puerta de otros mundos.
Otra indicación: las matemáticas
estaban solamente en su principio, y se podía ir mucho más lejos que
Euclides, el cual, hay que recordarlo, fue traducido por primera vez al
inglés por Dee. Éste tenía toda la razón al afirmar esto, y las
geometrías no euclidianas que debían aparecer más tarde confirman su
punto de vista.
Es posible, dice también John Dee, construir
máquinas totalmente automáticas que realicen todo el trabajo del hombre.
Esto, añade, ha sido ya realizado en otra parte, en 1585 ... Ojalá
supiésemos dónde.
Insiste también en la importancia de los
números y en la considerable dificultad de la aritmética superior. Una
vez más, tiene razón. La teoría de los números ha resultado ser la rama
más difícil de las matemáticas, mucho más que el álgebra o la geometría.
Es
muy importante, observa John Dee, estudiar los sueños, que revelan, a
la vez, nuestro mundo interior y mundos exteriores. Este punto de vista,
perfectamente jungiano, le sitúa muy por delante de su época. Es
esencial, advierte también, ocultar a las masas secretos que pueden ser
sumamente peligrosos. Aquí encontramos otra idea moderna. Como la
encontramos en el tema permanente del Diario de Dee, a saber, que se
pueden conseguir facultades perfectamente naturales e ilimitadas con el
conocimiento de la Naturaleza, pero que se necesita gastar mucho dinero
en la investigación.
Para tener este dinero buscó la protección
de los grandes e intentó fabricar oro. No consiguió ninguna de ambas
cosas. Si hubiese podido encontrar un mecenas, habría cambiado el mundo.
Entre
las personas a quienes conoció ¿se encontraba William Shakespeare
(1564-1616)? Me inclino a creer que sí. Cierto número de críticos
shakespearianos están de acuerdo en admitir que John Dee es el original
del personaje Próspero, de La Tempestad. En cambio, todavía no ha
habido, que yo sepa, antishakespearianos lo bastante locos pata imaginar
que la obra de Shakespeare fue escrita por John Dee. Sin embargo, Dee
me parece un candidato mejor que Francis Bacon a este respecto.
A
propósito, no puedo resistir la tentación de citar una teoría del
humorista inglés A. A. Milne. Según él, Shakespeare no escribió
solamente su propia obra, sino también Novum Organum, por cuenta de
Francis Bacon, ¡que era completamente analfabeto! Esta teoría enfureció a
los baconianos, es decir, a los que sostienen que Francis Bacon
escribió la obra de Shakespeare.
Liquidemos de pasada otra
leyenda: John Dee no tradujo jamás el libro condenado, el Necronomicón
de Abdul Al Azred, por la sencilla razón de que esta obra no ha existido
nun¬ca. Pero, como dice acertadamente Lin Carter, si el Necronomicón
hubiese existido, Dee habría sido, evidentemente, el único hombre capaz
de procurárselo y de traducirlo.
Desgraciadamente, el
Necronomicón fue inventado de cabo a rabo por Lovecraft, el cual me lo
confirmó en una carta. Es una lástima.
La piedra negra,
procedente de otro universo, recogida en primer lugar por el conde de
Peterborough y, después, por Horace Walpole, se halla actualmente en el
«British Museum». Este no permite que se utilice ni que sea sometida a
ciertos análisis. Es una decisión lamentable. Pero si los análisis del
carbono que compone esta piedra diesen una forma isotópica distinta de
la del carbono terrestre, demostrando que la piedra viene de otra parte,
todo el mundo se sentiría aturrullado.
La Mónada jeroglífica de
Dee puede encontrarse o conseguirse en forma de fotocopias. Pero sin las
claves correspondientes a los diversos códigos de la obra, y sin los
otros manuscritos de John Dee, quemados en Mortlake o destruidos por
orden del rey Jacobo I, no puede servirnos de gran cosa.
Fuente
Bergier, Jacques. Los libros Condenados. Barcelona: Plaza & Janes, 1971
Jue Nov 30, 2023 9:44 pm por Velociraptor
» GRAVES INCIDENTES EN EL MARACANÁ entre la policía y la hinchada: Argentina se retiró
Mar Nov 21, 2023 9:53 pm por Velociraptor
» Noticias de Argentina
Lun Nov 20, 2023 10:05 pm por Velociraptor
» "La ayuda va en camino": EEUU envía portaaviones y buques destructores para apoyar a Israel
Mar Oct 17, 2023 9:32 pm por Velociraptor
» SEGUIMIENTO GUERRA DE PUTIN, MAS DE 120.000 SOLDADOS RUSOS ABATIDOS
Miér Ago 23, 2023 4:46 pm por Velociraptor
» Crimen organizado castrochavista en las Américas
Sáb Ago 12, 2023 11:00 pm por Velociraptor
» Asesinato de Fernando Villavicencio en Ecuador señala al socialismo del siglo 21
Sáb Ago 12, 2023 10:56 pm por Velociraptor
» Narcoestados castrochavistas atacan a democracias en las Américas
Sáb Ago 12, 2023 10:51 pm por Velociraptor
» Democracia del Perú y el ataque castrochavista
Sáb Ago 12, 2023 10:45 pm por Velociraptor
» "URGENTE": SEGUIMIENTO DE SISMOS A NIVEL MUNDIAL JUNIO 2018
Lun Jul 17, 2023 9:39 pm por Velociraptor
» ¿Se derrumba el eje bolivariano en América Latina?
Lun Jul 10, 2023 11:13 pm por Velociraptor
» FUERTE SISMO SUPERFICIAL 6.4 GOLFO CALIFORNIA
Dom Jun 18, 2023 9:56 pm por Velociraptor
» ¿DE QUE SE TRATA EL ELEMENTO 115?
Jue Mayo 25, 2023 10:52 pm por Velociraptor
» COMO CONSTRUYERON ESTO?
Mar Mayo 16, 2023 10:52 pm por Velociraptor
» TORNADOS DEVASTADORES AZOTAN EEUU
Miér Abr 05, 2023 9:50 pm por Velociraptor
» CHILE BAJO ATAQUE
Dom Abr 02, 2023 10:00 pm por Velociraptor
» SE VIENE LA TERCERA MUNDIAL EEUU CONSIGUE EL CONTROL TOTAL DE EUROPA
Sáb Abr 01, 2023 9:55 pm por Velociraptor
» Sonda espacial capta un gran objeto en una misteriosa trayectoria | Secretos de la NASA
Sáb Abr 01, 2023 9:47 pm por Velociraptor
» GRAN APAGÓN MUNDIAL
Lun Ene 16, 2023 10:11 pm por Velociraptor
» NOTICIAS DE VENEZUELA
Dom Ene 15, 2023 9:27 pm por Velociraptor
» NOTICIAS DE PERÚ
Miér Dic 07, 2022 9:17 pm por Velociraptor
» AVIONES VENEZOLANO-IRANIES CON PILOTOS TERRORISTAS OPERANDO EN LATINOAMÉRICA HACE MAS DE UN AÑO
Miér Oct 05, 2022 6:54 pm por Velociraptor
» Diputada española destruye la Agenda 2030 en 15 minutos
Lun Oct 03, 2022 9:08 pm por Velociraptor
» TORMENTA TROPICAL IAN AMENAZA FLORIDA
Jue Sep 29, 2022 9:45 pm por Velociraptor
» Así fue el impacto de la nave Dart contra el asteroide Dimorphos
Lun Sep 26, 2022 10:06 pm por Velociraptor
» LA REINA ISABEL II MUERE HOY A LOS 96 AÑOS
Jue Sep 08, 2022 10:30 pm por Velociraptor
» El pacto de Princeton, una alianza para la miseria y el sometimiento
Sáb Ago 20, 2022 11:37 pm por Velociraptor
» LA HISTORIA REAL DEL RESCATE DE LOS 33
Dom Ago 14, 2022 1:35 am por Velociraptor
» Impresionante avalancha en Kirguistán
Lun Jul 11, 2022 11:14 pm por Velociraptor
» El cielo ataca a España!! ¡Una granizada infernal ha golpeado Terue
Dom Jul 10, 2022 10:16 pm por Velociraptor
» BORIS JOHNSON RENUNCIA A LA PRESIDENCIA DE REINO UNIDO
Dom Jul 10, 2022 1:15 pm por Velociraptor
» Fracasa la Globalización | Mártires de la Humanidad | Esto lo Explica Todo | Trump 2024
Dom Jul 10, 2022 10:59 am por Velociraptor
» MECANISMO AUTOMÁTICO DE DESTRUCCIÓN DE LA HUMANIDAD "MANO MUERTA"
Lun Feb 28, 2022 10:46 pm por Velociraptor
» SEGUIMIENTO PANDEMIA CORONAVIRUS
Mar Dic 07, 2021 10:23 pm por Velociraptor
» Desenmascarando al Foro de São Paulo
Sáb Nov 27, 2021 10:26 pm por Velociraptor
» CAOS EN AEROPUETO DE KABUL AFGANISTAN
Jue Ago 26, 2021 8:32 pm por Velociraptor
» QUIEN GANA LA CARRERA POR ENCONTRAR LA CURA CONTRA EL CORONAVIRUS
Lun Ago 09, 2021 11:13 pm por Velociraptor
» BRUTAL Y DESCARADO FRAUDE EN ELECCIONES PRESIDENCIALES EEUU
Vie Ago 06, 2021 11:04 pm por Velociraptor
» CUBA SE LIBERA DEL CANCER
Lun Jul 26, 2021 8:21 pm por Velociraptor
» NOTICIAS DE BOLIVIA
Jue Jul 15, 2021 11:06 pm por Velociraptor
» CANTANTES INMORTALES
Vie Jun 04, 2021 10:13 pm por Velociraptor
» ESCALADA DE TENSIÓN ENTRE PALESTINA E ISRRAEL DEJA VARIOS MUERTOS
Jue Mayo 20, 2021 8:32 pm por Velociraptor
» CONSECUENCIAS RELACIONADAS CON LA SUBIDA EN EL NIVEL DEL MAR
Miér Mayo 19, 2021 11:09 pm por Velociraptor
» Los restos de un cohete chino fuera de control podrían impactar en la Tierra este fin de semana...
Dom Mayo 09, 2021 1:23 am por Velociraptor
» SEGUIMIENTO CONFLICTO UCRANIA RUSIA
Jue Abr 22, 2021 9:14 pm por Velociraptor