teoria sobre la pérdida del periodo de rotación de los planetas

Lo mismo que disminuye la gravedad, disminuyen las demás fuerzas que se
derivan de ella, y el movimiento de rotación es una de esas fuerzas.

Cuando disminuye la gravedad de un planeta, disminuye el peso o
fuerza de atracción de la masa, disminuye la velocidad de escape, la
gravedad superficial y el movimiento de rotación, en conjunto disminuyen
todas las fuerza que derivan de la gravedad, todo ello debido a que
disminuye el volumen interno de la masa estelar que forma el núcleo
interno de cada cuerpo.

Todos los cuerpos que tienen
gravedad desarrollan una “burbuja magnética” que envuelve a los cuerpos
que desarrollan gravedad, esta es una zona tubulares compuestas por
ondas electromagnéticas de doble polaridad que son las que, en su
conjunto, conocemos como campos de gravedad.

Esta
disminución de la Magnetosfera de los planetas, junto con la disminución
de la intensidad de la gravedad, son las responsables de producir la
disminución de los períodos de rotación de cada uno de los planetas de
nuestro Sistema Solar, así hasta desaparecer este movimiento. Esta
velocidad en el giro de rotación no es fija ni eterna, sino que
disminuye a través del tiempo como ya hemos dicho. De aquí que cada uno
de los planetas de nuestro Sistema Solar tenga distinta velocidad de
giro, distinto periodo de rotación, como podemos comprobar los periodos
de rotación van en aumento, de menos horas los mas jóvenes a mas horas o
días los mas viejos, por ejemplo: Júpiter 9,8 h., Saturno 10,5 h.,
Urano 10,8 h., Neptuno 15,7 h., Tierra 1 día (23,9h.), Marte 24,6 h.,
Plutón 153,6 h. ó 6,4 días, Mercurio 1400,4 h. ó 58,6 días, Venus 5832
h. ó 243 días, y por ultimo la Luna, ya no tiene periodo de rotación,
así se desmuestra que el periodo de rotación disminuye con el tiempo
hasta desaparecer.

En realidad estas ondas
electromagnéticas de repulsión, son una parte inseparable de la
gravedad. Para conocer mejor como actúa y se desarrolla esta mecánica,
es preciso que conozcamos mejor esta fuerza.

La velocidad
del movimiento de rotación de los planetas, está interrelacionada con el
volumen interno de su masa activa (masa estelar), masa que en la
actualidad forma el núcleo interno de cada planeta. Este núcleo es
verdaderamente el que produce la fuerza de gravedad, y es el que a
través del tiempo disminuye hasta desaparecer. Conforme disminuye la
gravedad disminuyen las ondas electromagnéticas, de aquí que los cuerpos
más pequeños desarrollen conjuntos de ondas electromagnéticas más
pequeñas y de menor intensidad. Un ejemplo lo tendríamos entre el campo
de gravedad de Júpiter y el campo de gravedad de Mercurio, como podemos
ver en la siguiente figura 21-1.




Por lo tanto no es el volumen total de la masa de un planeta el que
desarrolla la fuerza de gravedad, sino el volumen de su masa estelar
(núcleo), el que desarrolla la fuerza de gravedad. cuanto más grande es
el núcleo, mayor es el volumen de masa que produce gravedad, esto
determina una mayor intensidad gravitatoria, un movimiento más rápido de
rotación, todo ello, nos revela la juventud de cada cuerpo.


Cuanto más pequeño es ese núcleo, más viejo es el cuerpo, más
débiles son las ondas electromagnéticas y menor es la intensidad que
tiene la fuerza de gravedad. Así que los planetas más viejos giran cada
vez más despacio, hasta que llega un momento en que el día se hace muy
lento, cada vez más hasta que ese cuerpo se para y deja de rotar. Por
ejemplo, la Tierra disminuirá su período de rotación poco a poco, por
ejemplo: de 24 h. pasará a 25, 26, 27, 28, 29, 30, 40, 50, 100, 200,
300 h., etc.. hasta llegar a un día de 86.212 horas o 3.592 días
actuales, próximo a la parada total del movimiento de rotación, como
podemos ver en la tabla 21-1, donde se refleja a modo
de ilustración, la disminución de la gravedad guarda relacionada con los
períodos de rotación. Este calculo es sólo a modo de orientación ya
que no disponemos de suficientes datos para establecer una disminución
exacta.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Tenemos que tener en cuenta que los períodos de rotación disminuyen con
el tiempo, igual que lo hace la fuerza de gravedad. Esta disminuye
porque la masa estelar del interior de cada cuerpo disminuye por efecto
de la mecánica de termofusión- nuclear, que, con el tiempo, produce un
desgaste de energía. Esta mecánica no se detiene ni se apaga por muchos
residuos que se acumulen en la zona exterior, ya que no necesita
respirar para su funcionamiento, a parte de que siempre habrá una grieta
o fisura por donde surjan al exterior los excesos de masa y energía,
que se generan en el interior. Al igual que sucede en la Tierra, sucede
en los demás planetas, tanto de nuestro Sistema Solar o de otros
sistemas estelares.

En la siguiente figura 21-2
podemos ver un ejemplo de cómo conforme disminuye el núcleo interno de
cada planeta disminuye la intensidad de la gravedad. Esto produce una
disminución de las ondas electromagnéticas.

Conforme disminuye
su masa estelar (núcleo interno de cada planeta), así disminuyen sus
ondas electromagnéticas de doble polaridad, y la intensidad del campo
de gravedad. Por este motivo, los planetas giran cada vez más despacio,
indistintamente de la situación a la que se encuentre cada uno del Sol;
si no, cómo podemos explicar que Mercurio, que se encuentra a 58
millones de km. del Sol, emplee 58,6 días, mientras que Plutón, a 5950
millones de km. desarrolle su período de rotación en sólo 6,4 días o
Júpiter, a 780 millones de km., lo haga en sólo 9,8 h.

La
intensidad de la gravedad es siempre proporcional al volumen interno de
la masa activa de cada uno de los cuerpos. De aquí la diferencia que
existe entre la velocidad de rotación de cada uno de los planetas,
aunque alguno de estos planetas tenga casi el mismo volumen de masa. Es
el caso de Venus y la Tierra. Venus tiene un diámetro de 12.042 km. y
desarrolla un período de rotación de -243,0 días; la Tierra, con un
diámetro de 12.756 km. desarrolla su período de rotación en 23,9 h.,
esto sin contar la distancia que hay de cada uno al Sol. Esto demuestra
que la gravedad no es producida por la masa total, ya que el volumen de
los dos planetas es muy parecido, pues solo hay 700 Km. más de diámetro
entre la Tierra y Venus y la intensidad de la gravedad de este último
es mucho más pequeña.

En la siguiente tabla, podemos hacer
diferentes comparaciones entre los distintos cuerpos del sistema solar:
podemos comparar el diámetro de cada uno de los planetas, su periodo de
rotación y de traslación, así como la distancia de cada cuerpo al Sol.
Podemos observar que los planetas más grandes y distantes al Sol, tienen
periodos de rotación más rápidos o veloces que los planetas más
pequeños y cercanos al centro de gravedad Esto quiere decir que los
planetas más lejanos tienen mayor intensidad gravitatoria que los
planetas más próximos o cercanos al Sol. De todo esto deducimos que lo
que produce la gravedad en cada cuerpo, no es el conjunto de su masa o
el total de su volumen, sino una parte interna de cada cuerpo
“denominada núcleo” el resto de la masa no produce gravedad. Se puede
concluir que los planetas más grandes tienen los núcleos, más grandes,
lo que se traduce en la composición de ondas electromagnéticas de mayor
amplitud o la generación de ondas gravitatorias de mayor intensidad.