Miedo al fin del mundo?

Los miedos ante una catástrofe mundial se relacionan con malestares propios y tienen que ver con un desplazamiento de lo interior a lo exterior.
Las profecías mayas sobre el fin del mundo en 2012 han generado temor en muchas personas. Al igual que ocurrió en torno al año 2000, se habla de la llegada de cataclismos y eventos destructivos destinados a aniquilar a la Tierra y a todos sus habitantes.

Por medio de un recorrido histórico, es sencillo encontrar que han surgido predicciones similares a las anteriores en diferentes momentos clave, como en los cambios de siglo o, más aún, de milenio. Desde una mirada psicoanalítica, cabe preguntarse sobre el origen último de dichos miedos y por qué tienen la capacidad de afectar a tantas personas.

Una condición necesaria para que algo externo y ajeno llegue a afectar, es que se ligue con un elemento interior..

Basta con encender el televisor para darnos cuenta que el mundo ha entrado en un caos vertiginoso, el pan nuestro de cada día se ha convertido en guerras, atentados, desastres naturales y sin embargo las profecías o los libros que hablan de ellas, siempre presentan la oportunidad de renovación, de purificación o sanación.

Es como si alguien o algo deseara que tomáramos conciencia de que nos encontramos en un punto crucial de la historia y existe una oportunidad. Cambiamos radicalmente nuestra manera de vivir o el sistema social, económico y ecológico que enmarcan nuestras vidas se extinguirá inevitablemente.

Indagando un poco, son cientos las profecías que predicen el final de esta etapa que dará paso a un nuevo amanecer. Qué tan bueno sea ese despertar, dependerá de cada uno de nosotros.